Los rollitos de calabacín son fáciles de preparar y son realmente muy sabrosos; perfectos para servir como sabroso aperitivo o como plato principal y gustarán por igual a pequeños y mayores por lo buenos y fibrosos que están.
Para que la receta salga bien, hay que cortar los calabacines en rodajas muy finas con la ayuda de una mandolina.
Los rollitos de calabacín están deliciosos si se comen calientes, pero están aún mejor tibios: el tiempo de reposo permitirá que los sabores armonicen aún más.Los rollitos de calabacín pueden guardarse en el frigorífico durante 2 días, cerrados en un recipiente hermético.
Ingredientes:
- 600 g de calabacines
- 200 g de jamón cocido
- 200 g de queso provola en lonchas
- 1 ramita de perejil
- Migas de pan
- Queso parmesano rallado
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal y pimienta
Preparación:
Lavar los calabacines, recortarlos y cortarlos en rodajas con la ayuda de una mandolina.
Prepara los ingredientes para el pan rallado: vierte el aceite de oliva virgen extra en un bol, añade una pizca de sal y pimienta.
Pon el pan rallado en un segundo bol y añade el perejil picado y el queso parmesano rallado. Pasar las rodajas de calabacín primero por el aceite aromatizado y luego por el pan rallado, haciendo que se peguen bien.
Rellenar las rodajas de calabacín empanadas con tiras de jamón cocido y queso provola.
Enróllalas y coloca los rollitos uno al lado del otro en una fuente de horno untada con un poco de aceite.
Añadir un poco de aceite y una pizca de queso parmesano rallado en la superficie de los rollos y hornear los rollos de calabacín en un horno estático precalentado a 180 °C durante 25 minutos hasta que la superficie esté dorada.
rebastisonia@gmail.com. gracias probaré los rollos de calabacines